La región de Lombardía en Italia, Milán en particular, se ha visto muy afectada por la pandemia. Pese a que el número diario de personas infectadas con Covid-19 en Italia es bajo en comparación con el resto de Europa, Milán sigue mostrando un número relativamente alto de individuos contagiados. Bajo esta amenaza constante, ir al cine es un desafío, pero los operadores de cine, al menos en esta gran ciudad, se han esforzado por crear y hacer cumplir los protocolos de seguridad con el fin de dar a los espectadores una sensación de seguridad y confianza para que puedan disfrutar de una gran experiencia de entretenimiento.

            En el área metropolitana de Milán operan diecinueve multicines y seis cines de pantalla única. Recientemente, en un sábado de octubre, se proyectaron un total de 45 películas diferentes en 188 pantallas desde las 11am hasta las 9:30pm. Los precios de las entradas oscilaron entre € 7 (US$ 8,28) y € 9 (US$ 10,65).

            Para vivenciar el experimento, un reportero de VideoAge asistió a la tonta comedia romántica hecha en Italia, Divorzio a Las Vegas (en estos tiempos de crisis, ¡solo una comedia es suficiente!) a las 3:30 pm en el Plinius Multisala, un multiplex de seis pantallas con estrictos procedimientos de seguridad anti-Covid.

            En el mostrador de boletos, el vendedor registró los nombres y números de teléfono de los espectadores (con fines de rastreo en caso de que se descubra que alguien está infectado más adelante). Antes de ingresar a los auditorios, un empleado tomó la temperatura de los asistentes, recordando que había un dispensador de desinfectante de manos cerca.

            Las salas de proyección estaban bien ventiladas (pero carecían de filtros especializados) y se desinfectaban después de cada proyección. Todos los asientos fueron asignados previamente y un inspector se aseguró de que los clientes mantuvieran sus máscaras durante toda la película. El teatro donde se exhibió Divorzio... tenía 74 asientos, sin embargo, por razones de seguridad, solo se podía operar al 50 % de ocupación máxima.