Cable
Argentina
Omar Méndez
Set26,2013

A un mes de las elecciones legislativas de Argentina, algunos candidatos se acercan al mercado del cable local, reunido hasta mañana en el Hilton Hotel de la ciudad de Buenos Aires. Este miércoles se hizo presente en las Jornadas Internacionales de la Televisión por Cable 2013, Hermes Binner, candidato a diputado nacional por el Frente Progresista Cívico y Social. Hoy jueves se sumarán varios más para aprovechar el acto de apertura oficial del evento organizado por la Asociación Argentina de Televisión por Cable y la Cámara de Productores y Programadores de Señales Satelitales. Será la gran oportunidad para que revelen sus posiciones respecto a la vigente ley de medios, impulsada por el gobierno argentino para exterminar al principal grupo del mercado nacional y uno de los más importantes a nivel mundial. Clarín, propietario de Cablevisión, el líder cableoperador, intenta desde hace años sobrevivir a los ataques lanzados por la actual presidente del país, Cristina Fernández de Kirchner.
Binner, como político, no agregó nada nuevo al debate; solo frases obvias, es decir muy al tono con lo que el mercado en general y Clarín en particular deseaba escuchar.
El clima en la jornada inaugural dejó en evidencia las preocupaciones de los pequeños operadores, víctimas colaterales del enfrentamiento entre el grupo dominante y el gobierno. En la reunión que los convocó coincidieron que la denominada Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual es una norma que nació vieja y no contempla la realidad de la actividad. “Las restricciones planteadas no permiten una discusión en serio, orientada hacia la pluralidad de voces. Las cooperativas subsidian con servicios monopólicos su servicio de cable en detrimento de las pymes locales”, comentó Héctor Delloni, presidente de la Asociación Santafesina de TV por Cable.
Delloni, precisamente, puso el dedo en la llaga de los empresarios del cable aún independientes. Dante Gigena, otro operador del interior argentino, denunció directamente a las cooperativas que niegan el uso de los postes para tender sus cables si toman la decisión de ofrecer internet. El mismo condicionamiento lo planten en distintos puntos del territorio nacional otras cooperativas, grupos que ofrecen servicios públicos de forma monopólica en sus territorios.
“El cable argentino da servicio a más de 900 localidades con 800 empresas; generamos más de 5000 puestos de trabajo directo y unos 7000 indirectos, además de dar servicio al 20 por ciento de los 6,5 millones de abonados que tiene la televisión por cable de la Argentina. Somos la voz del interior del interior y representamos a quienes llevaron comunicación hace cincuenta años a todo el país. Hoy la industria está en peligro de desaparecer por la regulación existente que nos hace competir con Cooperativas Monopólicas de Servicios Públicos, prestadoras de servicios de tarjeta de crédito, banco de sangre, cementerio parque y otros innumerables, todos en una sola factura de forma irregular. Además cuentan con excepciones impositivas en tanto que nosotros, con un solo servicio debemos abonar la totalidad de los impuestos y reinvertir para dar el servicio de excelencia que pretendemos dar a nuestros clientes”, dijo Gigena en la primera charla académica de las Jornadas Internacionales que se desarrollan en el hotel Hilton.
La exposición del cableoperador argentino muestra el impacto que tiene en el mercado independiente la apertura del servicio de TV paga a favor de grupos locales monopólicos (como son las cooperativas), una de las aberraciones introducidas por la ley de medios del gobierno kirchnerista.
Juan Carlos Perez Bello, experto en derecho administrativo y de radiodifusión en Argentina, puso el acento en la contradicción de la ley actual. “Plantea la limitación a los servicios públicos para dar servicios de radiodifusión, pero luego hace una excepción con las Cooperativas, bajo la figura de sin fines de lucro, que es contradictoria dado que si los exceptúa del impuesto a las ganancias, quiere decir que lo tienen. Por otra parte, la posición de dominancia por acceso a todos los hogares con múltiples servicios es indiscutible y plantea una desigualdad radical. Es el único caso de una ley que genera una condición general para luego dar una excepción particular, y no da ningún espacio el organismo regulador para la consideración de oposiciones; otorga las licencias sin análisis del daño o las condiciones de cada caso”, sostuvo.
Otros pequeños empresarios del cable como Raúl Suárez, director de TV Cable San Guillermo, en la provincia de Santa Fé, comentó la situación que vive en su jurisdicción. “La cooperativa que opera en San Guillermo se encarga de la provisión de una gran cantidad de servicios públicos, todos ellos monopólicos. Hoy, ya están dando el servicio, en algunos casos hasta gratuitamente”, destacó.